Tras recibir diferentes consideraciones del mercado, la empresa de Cúneo decidió complementar la gama de los e-WORKER con baterías de plomo ácido con los que incorporan un paquete de baterías de litio. Las ventajas incluyen una alta eficiencia energética, una vida útil más larga, una carga rápida y la posibilidad de retirar la batería en 15 minutos.
En una primera fase Merlo decidió utilizar baterías de plomo ácido de altas prestaciones para el e-WORKER. Una tecnología seguramente madura, conocida y utilizada a gran escala en el mundo de las carretillas elevadoras, orientada a las necesidades operativas de las empresas, operantes tanto en la industria como en la construcción o la agricultura.
Tras recibir diferentes consideraciones del mercado, Merlo ha decidido que los e-WORKER también puedan equiparse con un paquete de baterías de litio. De este modo, Merlo responde a algunas necesidades específicas del mercado y se propone como la única empresa que ofrece la doble configuración de plomo y litio.
Las baterías de litio tienen diversas ventajas con respecto a las de plomo ácido. Su eficiencia energética es alta, almacenan más energía en menos espacio, tienen una vida útil más larga (3000 ciclos frente a 1800), pueden recargarse rápidamente (o parcialmente) reduciendo el tiempo de inactividad y aumentando la productividad.
Por último, pero no por ello menos importante, las baterías de litio requieren menos mantenimiento que las de plomo ácido y no requieren inversiones en salas de carga o evacuadores de humos. El riesgo de períodos de inactividad se reduce al mínimo. El ciclo (VDI 2198) utilizado como estándar para la medición de las prestaciones de las carretillas elevadoras establece una autonomía de 7,5 horas.
El e-WORKER equipado con una batería de litio presenta algunos cambios. Entre ellos, además de una nueva interfaz de usuario y adhesivos en el lateral, el más importante es el selector de conexión BMS en la cabina, junto al apoyabrazos, que sirve para volver a conectar la batería, equipada con un sistema de apagado automático para limitar la autodescarga. De hecho, una de las grandes diferencias con respecto a las baterías de plomo ácido es que las baterías de litio tienen un verdadero cerebro, el sistema de gestión de baterías o BMS (Battery Management System), que desempeña numerosas funciones que controlan y supervisan en tiempo real el comportamiento de la batería de litio dentro de la aplicación. Al tratarse de una solución mucho más ligera respecto de la de plomo ácido, para no desequilibrar la máquina se ha equipado la batería con un lastre de aproximadamente 700 kg.
También para las máquinas configuradas con baterías de litio, los bajos de la máquina están libres, puesto que la batería se apoya solo en dos soportes laterales y está protegida dentro de su carcasa. De este modo, se puede retirar en aproximadamente 15 minutos utilizando las horquillas de una carretilla elevadora, de un manipulador telescópico o de una transpaleta.
Por último para facilitar el posicionamiento de las horquillas debajo de la batería, se dispone de un accesorio manual, cuyo perfil sigue exactamente el de los bajos de la máquina.